Decepcionante
Con el ánimo de que nadie pase por la situación que pasamos junto a mi actual señora, escribo para comentarles la ingrata situación que vivimos en nuestro matrimonio en relación al servicio prestado por Concepto Mándala. Nosotros contratamos el servicio con ellos con más de un año de anticipación para que todo saliera excelente y bien organizado. En nuestro matrimonio celebrado el 17 de noviembre de 2018 vimos lo siguiente tanto los novios, familiares y amigos. Adicionalmente, estos mismos puntos fueron planteados al proveedor en una reunión sostenida el lunes 26 de noviembre de 2018, donde ellos manifestaron sus puntos y ofrecieron una “solución” al mal servicio prestado.
Puntos buenos:
La ceremonia resultó bonita, como esperábamos, y el motivo principal por el cual mantuvimos a Concepto Mándala como proveedor principal. La organización muy encima y despreocupada según nos informaron las personas que hablaron tal día. Fue un amigo de nosotros quien terminó organizando la ceremonia para que esta tuviera una secuencia lógica.
Centro de eventos recomendado por ellos. Lindo lugar, precio razonable
Puntos malos:
Muy encima la organización de determinadas cosas (la mayoría), pese a que el contrato estuvo firmado hace mucho tiempo. Para todo había un “tranquilo” manifestando textualmente: “no sean ansiosos”, y finalmente, no se organizó nada con tiempo ni de buena manera. Nosotros nos quedamos con la sensación de que sólo para cobrar fueron rápidos.
No acompañar a la novia durante todo el proceso y ver qué necesitaban. La idea de una wedding es que esté lista para poder solucionar diferentes contingencias.
Centro de eventos puso tremendos problemas con el nivel del ruido. Al ser un lugar que recomendó Concepto Mándala eso debió haber estado hablado desde antes y no haber sido un tema para nosotros ese mismo día. Como consecuencia, durante el cóctel la música casi no se escuchaba dentro de la carpa, pero de todas formas fue muy incómodo y nos hizo perder tiempo valioso durante nuestra celebración.
No coordinar absolutamente nada con el fotógrafo. Las fotos familiares por ejemplo y/o fotos claves de determinados momentos que una wedding debiese manejar.
No coordinar el ingreso de las personas desde el cóctel hacia la carpa.
El Magic Mirror (foto cabina) no funcionó. Luego nos llevan algo de menor calidad y tampoco funcionó. Gastamos mucha plata en nuestra fiesta y por sobre todo tiempo y nos quedamos sin un recuerdo que era clave para nosotros, el libro de mensajes y las fotos que dieran las gracias a los invitados. Era el regalo de matri. “Son fotos solamente” no es una buena respuesta, porque para nosotros son el registro del día más importante de nuestras vidas y de los deseos de las personas que más nos importan. Esto lo contratamos con Concepto Mandala por confianza y siguiendo su consejo, y le dijimos que no al fotógrafo que es amigo de la familia y ofrece este servicio. Además, nos cobraron alimentación de esa persona aparte.
No hubo preocupación de tenernos comida, y variedad, a la novia le ofrecieron mil veces la misma tabla de camarón siendo vegetariana (la wedding planner no se preocupó de indicar que la novia es vegetariana).
Al término de la ceremonia, desconozco el motivo por el cual no sonó música. La ceremonia en su totalidad debía ser liderada por Concepto Mandala, generándose un incómodo silencio al momento de salir.
La gestión de wedding planner fue pésima. No hubo ningún tipo de organización ni de gestión. En reunión posterior al evento, y por insistencia de Concepto Mandala, ellos ofrecieron lo siguiente dado que reconocían sus faltas:
por el incumplimiento de Concepto Mandala, exigimos un 30% de devolución. Más que razonable. En reunión con Concepto Mandala ofrecieron un 15%, les propuse un 25% y que esperaba su respuesta para el viernes 28 de noviembre 2018. No tuvimos noticias de ellos.
El motivo de comentarles esta situación que nos paso por contratar Concepto Mándala es para que lo piensen muy bien antes de hacer su matrimonio con ellos. Es una fecha única y especial, y ellos dieron un servicio pésimo. No existe indemnización frente al daño que causaron y la mancha imborrable de su negligente actuar. Uno entiende que esto es un negocio para ellos, su trabajo, y que está bien que sea remunerado, pero esto estuvo lejos del servicio contratado. No se arriesguen, y váyanse con proveedores buenos y confiables.