El matrimonio de Ale y Fer en Concepción, Concepción

Lo pasamos tan bien que no podía creer cuando nos dijeron que ya nos teníamos que ir, ¡nadie quería irse! Jajaja, el tiempo pasó volando pero fue justo como lo queríamos, matrimonio de día, rodeados de naturaleza y de cariño, ¿qué más podríamos pedir? Estuvo tan entretenido que ni siquiera tuvimos que rellenar con el baile después de la comida, ¡se nos olvidó por completo, jajaja!

Lo fome sería que no me sentí tan cómoda con mi vestido, a pesar de que era hermoso y de todo mi gusto, alguien me lo pisó y rompió el toma cola, pero nada que un alfiler de gancho no solucione. El fotógrafo un siete y las fotos hermosas, la maquilladora llegó más que puntual y es un amor, maquilló a mi mamá y hermana también y se veían preciosas. El local y la comida nada que decir, espectacular y siempre atentos a todo, la mejor elección por lejos. También tuvimos un saxofonista de sorpresa que sacó las canciones que mi marido le pidió como sorpresa para nosotros y tocó durante todo el tiempo que llegaron los invitados y almuerzo, fue realmente precioso, además teníamos una cabina de fotos donde todos disfrutaron mucho, ¡hasta mis papás se tomaron varias fotos ahí!

Les recomiendo de corazón a todos mis proveedores, preocupados, todos atentos y siempre dispuestos a entregar más, a hacer cambios para ajustarse a lo que nosotros queríamos y a quedarse otro ratito si era necesario. Sé que nada es perfecto, pero ese día realmente fue perfecto para nosotros.

Ahora ya estamos pronto a cumplir 1 año desde nuestro matrimonio y 22 semanas de embarazo, así que muy felices. El matrimonio no es fácil, pero con amor de verdad, se puede. Muchas felicidades a todas las que se casaron y a las que están por hacerlo, ¡que todo salga como sueñan!