El matrimonio de Gonzalo y Vania en Lampa, Chacabuco

La crónica de nuestro matrimonio

Nuestro día comenzó a las 7 de la mañana de ese día sábado tomamos desayuno junto a mis padres. Luego de terminar unas cosas él se fue a casa a relajarse y poder vestirse tranquilo. Yo por mi parte comencé a las 3 arreglándome las uñas luego a las 5 la peluquera y a las 6 mi cuñada que fue mi madrina me maquillo ya eran las 7 y la casa de mi mamá era un caos todos corrían de un lado para otro yo sin haber almorzado y ya sin ganas de comer nada y más encima preocupada de k no me subiera o bajara el azúcar por mi diabetes por los nervios que ya a esa hora me estaba volviendo loca.

Para rematarla ya eran las 8:15 y el auto no llegaba a buscarme ni se lo creerán como estaba. Hasta que por fin llego ahí caí en cuenta que estaba por comenzar lo mejor de mi vida. Camino al altar se me olvido los nervios y de solo ver la cara de enamorado que tenía mi chanchito me dejo sin aliento creo que jamás olvidaré su rostro. De ahí en adelante todo fue maravilloso el padre hizo la ceremonia tan linda y motiva. Para que decir que al final cuando salimos de la iglesia nos esperaron todos afuera y nos tiraron arroz y pétalos, qué manera de estar feliz de ver a toda la gente feliz y acompañándonos en ese día tan especial.