El matrimonio de Rene y Daniela en Maipú, Santiago

Y fue el momento cuando entramos con el auto y estaba por bajar que me sentí más nerviosa que nunca, sentía mucha emoción, habíamos quedado de acuerdo en levantar el dedito si la jueza nos dejaba decir nuestros votos, pero Rene no hacía nada, solo me miraba y al mirarlo a él yo solo decía no lo puedo creer, esto está pasando, cuando caminamos por el pasillo con mi mamá alcanza a distinguir a personas y me sentía muy feliz de que me estuvieran acompañando en este momento, sentía que me iba a caer y los nervios me invadían, pero todos dijeron que no se me notó, habíamos ensayado lo del pasillo, era corto, pero no se sintió corto.

Con mi canción de entrada Sigur Ros- Hopppipolla, esa la había fichado hace tiempo desde que vi una película, me sentí demasiado feliz, y los nervios pasaron una vez estuve al lado de René, al tomarle la mano y verlo como siempre nos miramos, la jueza se dedicó a darnos nuestros tiempos, fue enviada por el cielo porque dijo palabras tan pero tan hermosas, que todos se conmovieron, nos dimos cuenta de que nuestro amor se notaba y todos ellos lo percibían, aun sin conocernos como la jueza, en el momento de decir los votos me sentí estafada ja, ja, ja, pero es que René dijo que los iba a leer y los dijo sin leer nada y allí dije yo me engaño, pero me salieron los votos con sorpresa al final, después de decir acepto volvimos a caminar por ese pasillo, pero de la mano, con la promesa de que ahora en adelante somos esa familia que queríamos ser y que juntos somos invencibles. Pasamos al coctel y aprovecha de comer cuando te ofrezcan porque pasa que empiezan los abrazos y no agarras nada, después nos sacamos fotos y entre las fotos yo ocultaba la comida detrás del ramo, ja, ja, ja fue la mejor técnica, al pasar a cenar le tenía una sorpresa a René y le canté una canción. nunca había cantado en público, pero mi mejor amiga me apaño con su ukelele y nadie se lo esperaba, comimos rico y todo salió perfecto. Nuestros invitados nos llenaron de palabras hermosas en cada uno de sus discursos y después venía lo bueno, pasamos al salón y Rene me tenía una sorpresa, hizo un video con muchas fotos de nosotros desde el inicio, pues casi 13 años da pie para muchas fotos y anécdotas y si todo es posible ! Partimos la torta y eso fue muy duro, nos dieron tip ja, ja, ja, pero nunca pensé que nos costaría tanto, pero lo logramos, mi ramo lo hice con cintas para ir cortando al son de la música, y el René saco la liga con un bailecito. A nuestras mamas les dijimos que no habría vals, pero las sorprendimos al ponerlo y bailar y después venía nuestro baile, dedicamos noches a ensayar y todo valió cada minuto, el vestido era tan perfecto para mí que fluía con el movimiento, algo muy importante para mí. Luego de eso invitamos a todos a celebrar y se armó la fiesta. Todos se fueron felices, todos nos desearon lo más bonito, hasta hoy aún nos hablan del matrimonio y que lo pasaron muy bien o me piden datos las chiquillas que se van a casar.

Si llegaron hasta acá leyendo se los agradezco, les quiero decir que creo que lo más estresante son los preparativos, uno piensa que algo va a salir mal y se estresa, pero cuando el día llega solo deben fluir, acompañarse y ese día va a pasar volando, no se van a dar cuenta cuando estén rumbo a su próximo destino, aprovéchenlo, compartan con sus parejas todo, porque para eso es una relación para apoyarse en todo y cuando uno de los dos está mal, indicarlo con respeto y dedicación. ¡Espero que sus matrimonios sean tan maravillosos como el mío e incluso mejor ! y que exista mucho amor!

Y bueno, al terminar la fiesta se puso a lloviznar, así que el tiempo no se equivocó mucho jajaja, pero el día simplemente fue perfecto, si que lo haría mil veces si fuera necesario y elegiría a este hombre una otra vez. Un Abrazo.