El matrimonio de Gerad y Andrea en Coronel, Concepción

entí esos nervios de no saber qué pasaba, efectivamente no podía entrar sin que estuvieran los padrinos presentes ( eran las 8) yo atacada de nervios esperando en un pasaje cerca en el descapotable.Nuevo audio de WhatsApp me dio la alegría, ya podíamos llegar. No recuerdo muy bien como bajé pero vi a mis bellas damas de honor y solo gritábamos de alegría. Tomé el brazo de mi papá y comenzamos al ritmo de "Hasta mi Final".La ceremonia fue todo lo que esperábamos, mientras el Pastor hablaba nosotros cuchicheabamos y en un momento hicimos el trato que a pesar de cualquier cosa solo nos divirtieramos esa noche, que nada más importaba, solo nosotros. A la salida nos guateó el confeti, nos reímos mucho con eso.La fiesta estuvo genial, la comida exquisita, elegimos la gente precisa y todo valió la pena.

Nuestro baile salió hermoso, fue mágico y parecía que estábamos en las nubes.

Sorprendí a mi esposo con un mix de baile junto a mis damas de honor que la rompió, dejamos la vida en la pista y en cada actividad del matrimonio.

Amé cada momento y los atesoro en mi corazón, dejamos los miedos, percances para disfrutar con los nuestros. Recibimos amor y lo compartimos con cada invitado.