El matrimonio de Gabriel y Ana en El Bosque, Santiago

La crónica de nuestro matrimonio

Nuestro matrimonio fue maravilloso. Decidimos casarnos después de 13 años de convivencia, con dos hijos en común de 7 y 8 años, y cada uno con una hija de relación anterior, es decir, los míos, los tuyos y los nuestros.

Queríamos una ceremonia especial y lo logramos. Ceremonia Yurima llevó a cabo todo lo que queríamos de una ceremonia. Mucho amor, emoción y alegría. Hicimos la ceremonia de las arenas, en que cada integrante de la familia (los 5) tenía una arena de un color y, al mismo tiempo, la vaciamos en un recipiente y todas se unen… Ese es el significado, la unión, ¿cómo podemos separar después las arenas? ¡No se separan nunca más!

Yo temía que lloviera y que se arruinara todo, ya que la ceremonia y fiesta la hicimos en el patio de nuestra casa. Gracias a Dios la lluvia esperó hasta el día domingo y todo resultó perfecto.

La cena y la música hicieron nuestro matrimonio aún más especial. Todos los invitados disfrutaron muchos y nuestros hijos felices. Mi hija mayor fue la testigo de mi marido, la del medio fue regando pétalos a mi entrada, y mi hijo menor fue quien me entregó, ya que mi padre falleció hace 2 años. Mi hijo y su padre vestían iguales... Yo entré del brazo de mi hijo de 7 años y de fondo el tema "Llegaste" de Roberto Carlos y Jennifre López. En el altar me esperaba mi marido llorando. Solo decía que me veía hermosa. Un momento único e inolvidable que atesoraré hasta el último día de mi vida.