El matrimonio de Alex y Alejandra en Limache, Quillota

La crónica de nuestro matrimonio

¡Uf! Un día muy esperado por nosotros. A pesar de ya estar casados por el civil hace tres años, esperábamos con ansias el bendecir ante Dios nuestra unión, la que por motivos de salud familiares, luego el estallido social y luego la pandemia, debimos postergar.

Pero nos preocupamos de cada detalle. El principal, elegir los invitados precisos que nos acompañarían ese día y con quienes queríamos y merecían disfrutar después de casi dos años de lucha en contra del Covid (todos somos profesionales de la salud).

Todo salió como lo planeamos. La ceremonia religiosa fue hermosa y emotiva ya que faltaba alguien muy importante para nosotros, mi madre, quien nos acompañó desde el cielo. Por otro lado, llegaron todos nuestros invitados y lo pasamos espectacular en la fiesta. Comimos rico, bebimos responsablemente y bailamos hasta el final de la fiesta. Sin dudas, un día inolvidable para todos.