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Matrimonios

Qué decir y no decir en el discurso del padrino

Para una misión tan importante como el discurso del padrino el día del matrimonio no siempre es fácil saber qué hacer o qué decir. Por eso, hoy queremos dar una ayudita a los padrinos con estos útiles tips.

Andrea & José Luis

 

Los discursos en los matrimonios cobran cada vez más protagonismo, y uno de los más destacados e importantes es el del padrino: el padre o alguien muy cercano y querido por la novia que dedica unas palabras a los recién casados. Y como un matrimonio es un momento festivo y emotivo, y hablar en público no siempre es fácil, hoy les dejamos unos útiles tips para saber qué hacer y decir en un momento tan significativo:

  • No te olvides de presentarte y agradecer. Para un buen discurso y tener la empatía de los invitados, aunque conozcas a muchos, es de cortesía presentarse, comentar tu relación con los novios y agradecer a los invitados su asistencia y compañía en un día tan especial. Qué no hacer: Empezar a hablar de ti mismo, o contar cosas de los novios de forma egoísta sin hacer empatizar e integrar a los invitados; mucho menos estar en estado de ebriedad.
 
 
  • Sé tú mismo. Si eres el papá de la novia, se espera un cierto tono de solemnidad en el discurso, pero no te fuerces más allá de lo necesario para hablar de manera elegante y mesurada siendo tú mismo. Qué no hacer: Hacer chistes forzados, fuera de lugar, pero también estar exageradamente serio si es conocido que tu carácter es dicharachero y bromista. Hay que buscar un punto medio en que quepa la espontaneidad.
 
 
  • Cuenta alguna anécdota o historia no muy larga que ayude a los invitados a conocer un aspecto más cercano de los novios, que refleje la esencia de su amor o algo que te haya hecho ver que caminaban juntos a la felicidad. También puedes hablar de algunas cualidades de ellos por separado. Qué no hacer: Contar indiscreciones, hablar de los ex, de ‘chascarros’ negativos o hirientes. No es el momento de arreglar alguna cuenta pendiente, sino de compartir buenos deseos y bendiciones.
 
 
  • Hacer un discurso no muy largo y dedicado a los novios. La duración ideal es de 2 a 3 minutos, y debe tratar sobre el tema que los convoca, es decir, debes ir al punto y no andar por las ramas, para lo que te servirá escribirlo y ensayarlo previamente y llevar un papel con las ideas principales por si lo necesitas. La idea es motivar al auditorio, no aburrirlos, y dar tu apoyo a los novios. Qué no hacer: alargarse mucho, salirse del tema, empezar a opinar de otras cosas o perder el hilo por querer alargarte mucho.